sábado, 24 de marzo de 2018

Granizo mm


Anoche estaba en la cama sin haberme dormido del todo, pero sumida en un descanso muy placentero, pensando en el paraíso del útero, agotada porque estoy muy agitada, y empezó a llover con muchísima fuerza. Napoleón se levantó de un golpe y abrió la ventana para que lo oyésemos mejor. Me dio mucho gusto y no abrí los ojos. El sonido de la lluvia despertó en mi una visión subparpádea, veía en la pantalla de mi cine uterino la caída del granizo, bolas grises en cascada, en un sinfín de super8 milímetros. Esta imagen sinestésica desapareció en el momento en que dejó de llover.