Es propio del hombre basar sus decisiones en el punto crítico, lo que es como decir que todo acierto humano se nutre de la pulsión de muerte, si me permitís que lo diga y lo ponga en negrita como zahorí que con palito bimegisto oscurece aquello que busca para alumbrarse y encontrarlo.
El descrédito a los bancos se ha generalizado, las revueltas se suceden y se sucederán, y ya no se cabe en las calles. ¿Cómo empezamos a vivir así?
No fue aquí:
Sino antes:
Este matrimoño tomó una decisión. No quiero decir que supieran, al elegir, que de ella saldrían las grandes avenidas, la educación universitaria para todos, los carniceros del centro de Francia para que Léon Bloy y Claude Chabrol se metieran con ellos, las ediciones de bolsillo, las reproducciones de su retrato colgadas en multitud de comedores de Ikea, la moral esclava o las genealogías de la moral, las jaulas para un solo canario audible desde la portería por los cinco pisos, los asesinos de Modigliani, la vuelta a Europa en cinco días, los 28.000 vuelos cancelados, el reciclaje, todos los bmws que nos adelantan en la carretera de La Coruña, la propaganda electoral en el buzón, la exposición del Santo Sudario, la prohibición del botellón, el chino que te vende una botella de whisky a las once y media sin un gesto cómplice, todo lo que veáis vosotros, yo qué sé.
La decisión que tomaron estos señores fue suscitada por el siguiente palíndromo:
¡ORA! ¡VALOR! ... ¿O ROL AVARO?
¡Ora! ¡Valor! era lo que se recomendaban unos a otros los caballeros templarios. Rezo y arrojo, y con entusiasmo se daban ánimos unos a otros. Pero demasiado entusiasmo y demasiada sangría acaban enervando un poco, y hete aquí que un pepito grillo más dorado nos sugiere en la oreja un nuevo papel en la vida. ¿Por qué no nos dejamos de viajes y nos dedicamos a amasar dinero, que nos gastaremos en grandes avenidas, educación para todos...?
Creo que, tras treinta años de incidir Occidente en la segunda parte del palíndromo por aquello de Hayek, la deconstrucción del prurito insurgente de los 60/70 y el gozoso descubrimiento de Malvania (esa síntesis limbopétrea de Sodoma y Babilonia), ahora con el batacazo económico y las agitaciones periféricas de los nuevos hashishin, la primera parte del palíndromo vuelve a estar de moda.
ResponderEliminarJusto acabo de responder a alguien en el foro MC que me reprochaba ese sentirme de siempre más heroico que prestamista. Aquí dejo link (que, como es habitual conmigo, conduce a unos cuantos links más).
El caballero de la Orden del Link.
ResponderEliminar"En nuestras ciudades mueren hombres por el desplome del andamiaje "
ResponderEliminarLos cojones 33: mueren hombres porque en todas partes los insiders defienden sus privilegios y el derecho a gastar como marineros borrachos trabajando apenas como funcionarios helenos. No caerá la breva de que los veamos ahorcados.
Bueno, toisones, vellocinos y charreteras tienen mucho de links, en el sentido más indumentario del término, así que uno sigue como siempre, entre la tradición y la modernez.
ResponderEliminarYa sabía yo que ibas a poner el punto sobre la íes, J, cuando redactaba esas frases.
ResponderEliminarDe todos modos, no he dicho nada que no pudiera decir cualquiera, con cualquier opinión. Yo qué sé.
Yo no quiero ver ahorcado a nadie, ni sus barbas cortar.
Cortadas, I meant.
ResponderEliminarEn realidad, lo de la horca es una concesión a la modernidad, yo soy más del hanged, drawn and quartered, que es lo propio por rebelión y sedición.
ResponderEliminar¡Es una concesión al AJO, al ajo de España!
ResponderEliminar"Ahí estaba el general, solmene, terrible, con todos los links por el pecho."
ResponderEliminar"Le han concedido un link al valor."
¿la vecinita de al lado es la reptiliana Carlotilla con chupete?
ResponderEliminarRol Avaro, dijo:
ResponderEliminar"¡Qué bien se siente usted hoy! ¡Que primaveral y deseosa de resaca buena con un manhattan, cereza al fondo, pitillo y brisa! Por la foto, digo."
Mucho Derrida veo yo por aquí. El andamiaje siempre se ha desplomado y no por eso mueren los hombres necesariamente. En las ciudades, se quedan solos y esperan. Todos somos unos insiders a la par que unos outsiders. Pensar que estamos fuera o dentro es algo que desgraciadamente creo yo se queda corto.
ResponderEliminar"Una era construye ciudades, una hora las destruye"
ResponderEliminarSéneca,
(o tal vez Cicerón, no me apetece levantarme a mirarlo)
FELICIDADES BÁRBARA
ResponderEliminarMuchas gracias, Anónimo. Ojalá supiera quién eres, pero me hace ilusión de todas formas.
ResponderEliminarSí, la de la foto es Charlotte Rampling.
ResponderEliminarYo creo, rhinslumber, que tienes razón.
ResponderEliminarA Derrida no lo he leído nunca, ni creo que me ponga ya.
Pues ponte ponte. Que vale la pena hablar sobre lo leído, pero más aún sobre lo no leído.
ResponderEliminarEn eso caso seguiré sin leerlo.
ResponderEliminarMe encanta la estancia donde habita el señor que acaba de instalarse al lado. Pero mi vista cansada no lo reconoce muy bien. ¿Marcel Proust, William Powell?
ResponderEliminarRobert Louis Stevenson.
ResponderEliminarse ha caido el andamiaje, el edificio, los cimientos...
ResponderEliminarLos cimientos han llegado a Australia.
ResponderEliminarBárbara, el Luminar te canta: BLASONAME OTRA VEEEZ y Lupercio, desde PDL, te hipa: ¿Y DE LO MIO, QUE?
ResponderEliminarBárbara, que no me entere yo de que te canta el Luminar.
ResponderEliminarLa canción del Luminar es muy grata de escuchar (y también de olfatear -si nos ponemos pituitarios-).
ResponderEliminarNo distingo bien la ilustración lateral: ¿la boda lagarterana del ogro Shrek o alguna cosa hindú?
ResponderEliminarLo segun.
ResponderEliminarAlucino con la nueva ilustración lateral: ¿no será el cartel promocional de la versión norcoreana de LOS DUELISTAS dirigida, interpretada y escrita por el dictador de ominosa permanén? (seguro que se pide el papel de Harvey Keitel por aquello de la contumacia puñetera)
ResponderEliminarOiga, menos descabezar y más entradas que ha pasado más de un mes y está a punto de llegar el verano.
ResponderEliminarOiga, es una gandula (el femenino lo he deducido de algunos comentarios), a este paso vamos a quedarnos con la mente como un erial.
ResponderEliminarEs verdad, estoy vaguísima. Pronto me regeneraré.
ResponderEliminarHágalo pronto, señora mía, o me veré obligado a desenterrar a don Joaquín Costa.
ResponderEliminarHe dicho.
En el hilo piellobino cuántico le he dejado otro correctivo.
Intrigante la nueva foto de aquí al lado. ¿Qué programa está viendo el/la televidente (no distingo muy bien su género)?
ResponderEliminar¡Es Mick Jagger!
ResponderEliminarEntre que la foto es diminuta y que yo no veo pues como si es don Ramón Menéndez Pidal.
ResponderEliminarMenuda parejita, Mick Jagger y Menéndez Pidal.
ResponderEliminarDe la manita sobre Rocinante en plan Templario pobretón.
ResponderEliminarQuermosura...
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