Yo cada día como mejor, cada vez con más proporción de vegetales y pescado. Ayer precisamente me compré un bote de garbanzos para la "ropa vieja" que suelo hacerme cada diez días (los garbanzos frititos sobre un previo sofrito con cebolla, puerro, algún producto porcino para que suelte su grasilla y sabor -esta próxima vez será fiambre de cerdo imitando cabeza de jabalí: me hubiera gustado comprar algo remotamente relacionado con el jamón serrano pero se han disparado los precios con las fiestas-, pimiento verde y, a veces, manzana para cortar un poco la grasa y procurar una mejor digestíon; todo ello acompañado de guarnición en freidora de patata, calabaza, zanahoria, calabacín...). Al dejar en calor residual le encajo un huevo en plan revuelto, para que no cuaje sino que dé jugosidad y un poco de queso rallado y voilá.
Hoy, interrumpiendo mi busca de las dichosas broñigas, me he hecho un plato así como renano, con salchicha blanca, cebolleta, puerro, salsa de pimienta verde, unas setas rehidratadas con cerveza desde la noche anterior, pimiento verde y unos trocitos de kaki, bien sazonado con semilla de amapola, clavo, cilantro y perejil, más la guarnición de freidora ya mentada. Suena inmodesto pero cada día me doy de comer mejor (jo, parezco el Nietzsche de ECCE HOMO -por aquello del autoelogio-).
La verdad, fue la hernia de hiato lo que me obligó a abandonar una dieta basada en mondongos rebozados precocinados y en pizzas y paninis congelados para explorar terrenos menos onerosos para mi digestión. Y ahora entre mi esófago y yo parece haber una cierta entente cordiale.
Algún día/tarde/¿noche? tendremos que probar el manjar ese de las pulgas. Junto con la cosa abroñigal es otra de mis incógnitas del momento.
Muy bonita su idea de relacionar la comida chatarra con las lentejas, por su alto contenido en hierro, sí, pero también por su frecuente presentación en forma de lata, como las espinacas de Popeye, otro alimento chatarra por excelencia, capaz incluso de mutar los biceps en yunques.
Nada, eso sí, para persuadirnos del riesgo mutante delacomida chatarra como el tráiler de la mítica Tetsuo:
No he visto esa peli, pero el trailer me impresiona bastante. Los japoneses me son misteriosísimos. Estaba viendo el trailer un poco espantada y de repente me he reído porque la primera palabra que dicen me ha parecido entenderla en español, como si estuviese inesperadamente doblada, la peli, y he oído que decían "Perdón" con una voz un poco de coña. Qué raro, no tenía nada que ver y por eso me he reído.
Pues yo a eso no le llamo ropavieja, aunque suena muy rico. Yo la hago con el morcillo con que he hecho los garbanzos, con cebolla, con pimiento rojo y con tomate frito.
En cuanto acabe lo que estoy haciendo, dentro de unos días, podré salir a tomar albróñigas, verbenas y de todo, a ver qué nos dan.
Me lo ha puesto a huevo: "22.41 (aproximadamente) El parroquiano cantaor abre tanto la boca para expresar su penita, que se le cae la dentadura postiza en la fuente de las albóndigas. Cuando mete la mano para recuperarla, el camarero le golpea la cabeza con un queso de bola y le dice que ya está bien, que en lo que va de semana ya se lleva comidas ocho albóndigas con el truco de la dentadura, pero que él no es un (ininteligible) y que las lleva contabilizadas. El cantaor amonestado replica que él no necesita robar albóndigas de esta pocilga, que él ha sido el rey de la copla en París y que siempre que quiere tiene mesa puesta en Maxim’s. Por toda respuesta, el camarero sirve vino". Eduardo Mendoza, Sin noticias de Gurb.
Yo tuve TETSUO en mis manos, en dvd, y no pude pasar de la primera media hora. Me la dejó Dildo y es, con PI (con la que la asocio inconscientemente), uno de los fetiches dildescos que (como la literatura de Borges y la de cierto exPDL) resultan impenetrables para mi mente, que no se entera de nada y se aburre en el trance (a veces veo o leo algo de lo que no me entero hasta dos tres revisiones pero, al menos, me paso un buen rato con ello -me ocurrió con LOGICA DEL SENTIDO de Deleuze, con toda aquella barahúnda estructuralista a cuenta de Artaud y Lewis Carroll, y con la película PANDORA Y EL HOLANDES ERRANTE -bueno, y con el primer visionado de cosas de Lynch, como BLUE VELVET y buena parte de la serie TWINN PEAKS-).
Bueno, la idea lo que era es un perro, pero por metonimia admitimos que la idea es un diente. No sabemos adónde nos va a llevar este presupuesto, aviso.
Que de las lentejas hayamos llegado a esto es mérito de los comentaristas, por supuesto, que como en la famosa pensión, son la estrella de este blog que se dedica a las especies y por tanto a las subespecies.
Y, en efecto, la ropa vieja es la que tú dices. Yo llamo así a mi mejunje por aquello de los garbanzos un poco socarraos, y la coincidencia de ingredientes (en casa de mis tíos sí se le echaba, aparte del morcillo, los tropezones porcinos del cocido, como chorizo y morcilla) como cebolla, patata, ¡repollo! (que se me olvidó: suelo comprar kits para cocido -esas bandejitas que vienen dos o tres zanahorias, un cuarto de repollo, apio, puerro, nabo y chirivía- y suelo usar los ingredientes para diversos platos -el nabo, el apio y la chirivía van bien con el pescado-), zanahoria...
Perdóname la pijada, pero la vajilla es una San Claudio, el mismo modelo de la de diario en casa (facilísima de reponer, eterna). Te alabo el gusto :). Mis lentejas (las adoro -las lentejas en general no necesariamente las mías) lucen casi igual. Aunque suelo reservar para mí (me pierden esos otros "piños" y nadie se pelea conmigo por ellos) la cabeza de ajos de rigor (si me oyese Julio Camba...) Una curiosidad ¿las preparáis con "todo crudo" o o con sofrito previo? Es que hace pocos días tuvimos ese debate.
Ah, nada de pijada, es verdad que lo es. De todos modos ("de todos fotos", había puesto), la foto es una pignoración de un blog, que es este. Es verdad que tienen buena pinta, y no creas que todas las fotos de lentejas que encontré la tenían. Yo no les suelo echar chorizo, ni hago sofrito. Les echo curry y calabaza, y lo pongo todo crudo al a vez. Pero vamos, para tardar menos. Lo del sofrito me parece muy rico siempre.
Yo las lentejas, por el momento, sólo las hago en verano en ensalada (otras veces garbanzos, otras judiones -con perdón-) con una vinagreta que me sale muy heterodoxamente rica. La inspiración me la dio Charlie M que es un artista de la leguminosa fría y caliente.
Yo cada día como mejor, cada vez con más proporción de vegetales y pescado. Ayer precisamente me compré un bote de garbanzos para la "ropa vieja" que suelo hacerme cada diez días (los garbanzos frititos sobre un previo sofrito con cebolla, puerro, algún producto porcino para que suelte su grasilla y sabor -esta próxima vez será fiambre de cerdo imitando cabeza de jabalí: me hubiera gustado comprar algo remotamente relacionado con el jamón serrano pero se han disparado los precios con las fiestas-, pimiento verde y, a veces, manzana para cortar un poco la grasa y procurar una mejor digestíon; todo ello acompañado de guarnición en freidora de patata, calabaza, zanahoria, calabacín...). Al dejar en calor residual le encajo un huevo en plan revuelto, para que no cuaje sino que dé jugosidad y un poco de queso rallado y voilá.
ResponderEliminarHoy, interrumpiendo mi busca de las dichosas broñigas, me he hecho un plato así como renano, con salchicha blanca, cebolleta, puerro, salsa de pimienta verde, unas setas rehidratadas con cerveza desde la noche anterior, pimiento verde y unos trocitos de kaki, bien sazonado con semilla de amapola, clavo, cilantro y perejil, más la guarnición de freidora ya mentada. Suena inmodesto pero cada día me doy de comer mejor (jo, parezco el Nietzsche de ECCE HOMO -por aquello del autoelogio-).
La verdad, fue la hernia de hiato lo que me obligó a abandonar una dieta basada en mondongos rebozados precocinados y en pizzas y paninis congelados para explorar terrenos menos onerosos para mi digestión. Y ahora entre mi esófago y yo parece haber una cierta entente cordiale.
Algún día/tarde/¿noche? tendremos que probar el manjar ese de las pulgas. Junto con la cosa abroñigal es otra de mis incógnitas del momento.
Muy bonita su idea de relacionar la comida chatarra con las lentejas, por su alto contenido en hierro, sí, pero también por su frecuente presentación en forma de lata, como las espinacas de Popeye, otro alimento chatarra por excelencia, capaz incluso de mutar los biceps en yunques.
ResponderEliminarNada, eso sí, para persuadirnos del riesgo mutante delacomida chatarra como el tráiler de la mítica Tetsuo:
http://www.youtube.com/watch?v=uROMTzJsfOI
No he visto esa peli, pero el trailer me impresiona bastante. Los japoneses me son misteriosísimos. Estaba viendo el trailer un poco espantada y de repente me he reído porque la primera palabra que dicen me ha parecido entenderla en español, como si estuviese inesperadamente doblada, la peli, y he oído que decían "Perdón" con una voz un poco de coña. Qué raro, no tenía nada que ver y por eso me he reído.
ResponderEliminarPues yo a eso no le llamo ropavieja, aunque suena muy rico. Yo la hago con el morcillo con que he hecho los garbanzos, con cebolla, con pimiento rojo y con tomate frito.
ResponderEliminarEn cuanto acabe lo que estoy haciendo, dentro de unos días, podré salir a tomar albróñigas, verbenas y de todo, a ver qué nos dan.
Eso es lo que hay que hacer con las piñatas, destrozarlas, ¿no?
ResponderEliminarPues sí, no me había dado cuenta. Es verdad que es lo conveniente, saludable y divertido.
ResponderEliminarMe lo ha puesto a huevo:
ResponderEliminar"22.41 (aproximadamente) El parroquiano cantaor abre tanto la boca para expresar su penita, que se le cae la dentadura postiza en la fuente de las albóndigas. Cuando mete la mano para recuperarla, el camarero le golpea la cabeza con un queso de bola y le dice que ya está bien, que en lo que va de semana ya se lleva comidas ocho albóndigas con el truco de la dentadura, pero que él no es un (ininteligible) y que las lleva contabilizadas. El cantaor amonestado replica que él no necesita robar albóndigas de esta pocilga, que él ha sido el rey de la copla en París y que siempre que quiere tiene mesa puesta en Maxim’s. Por toda respuesta, el camarero sirve vino".
Eduardo Mendoza, Sin noticias de Gurb.
Qué bueno, joé. Me lo voy a leer otra vez, me apetece muchísimo. Qué curiosa la aparición de la idea de los dientes estos días.
ResponderEliminar"Los dientes como idea."
"Si esa idea es un perro, te muerde."
Anda, ahora que me acuerdo.
Yo tuve TETSUO en mis manos, en dvd, y no pude pasar de la primera media hora. Me la dejó Dildo y es, con PI (con la que la asocio inconscientemente), uno de los fetiches dildescos que (como la literatura de Borges y la de cierto exPDL) resultan impenetrables para mi mente, que no se entera de nada y se aburre en el trance (a veces veo o leo algo de lo que no me entero hasta dos tres revisiones pero, al menos, me paso un buen rato con ello -me ocurrió con LOGICA DEL SENTIDO de Deleuze, con toda aquella barahúnda estructuralista a cuenta de Artaud y Lewis Carroll, y con la película PANDORA Y EL HOLANDES ERRANTE -bueno, y con el primer visionado de cosas de Lynch, como BLUE VELVET y buena parte de la serie TWINN PEAKS-).
ResponderEliminarY por cierto, Hugo, a ver qué te parece esto:
ResponderEliminar"Todo bíceps es un yunque latente."
o "Todo bíceps lleva un yunque en sí."
Decía Hegel que "el espíritu es un hueso". Lo de que "la idea sea un diente" parece una subespecie de lo anterior.
ResponderEliminarBueno, la idea lo que era es un perro, pero por metonimia admitimos que la idea es un diente. No sabemos adónde nos va a llevar este presupuesto, aviso.
ResponderEliminarQue de las lentejas hayamos llegado a esto es mérito de los comentaristas, por supuesto, que como en la famosa pensión, son la estrella de este blog que se dedica a las especies y por tanto a las subespecies.
Y, en efecto, la ropa vieja es la que tú dices. Yo llamo así a mi mejunje por aquello de los garbanzos un poco socarraos, y la coincidencia de ingredientes (en casa de mis tíos sí se le echaba, aparte del morcillo, los tropezones porcinos del cocido, como chorizo y morcilla) como cebolla, patata, ¡repollo! (que se me olvidó: suelo comprar kits para cocido -esas bandejitas que vienen dos o tres zanahorias, un cuarto de repollo, apio, puerro, nabo y chirivía- y suelo usar los ingredientes para diversos platos -el nabo, el apio y la chirivía van bien con el pescado-), zanahoria...
ResponderEliminarPerdóname la pijada, pero la vajilla es una San Claudio, el mismo modelo de la de diario en casa (facilísima de reponer, eterna). Te alabo el gusto :). Mis lentejas (las adoro -las lentejas en general no necesariamente las mías) lucen casi igual. Aunque suelo reservar para mí (me pierden esos otros "piños" y nadie se pelea conmigo por ellos) la cabeza de ajos de rigor (si me oyese Julio Camba...)
ResponderEliminarUna curiosidad ¿las preparáis con "todo crudo" o o con sofrito previo? Es que hace pocos días tuvimos ese debate.
Los dientes son la única parte del esqueleto a la vista...
ResponderEliminarAh, nada de pijada, es verdad que lo es. De todos modos ("de todos fotos", había puesto), la foto es una pignoración de un blog, que es este. Es verdad que tienen buena pinta, y no creas que todas las fotos de lentejas que encontré la tenían. Yo no les suelo echar chorizo, ni hago sofrito. Les echo curry y calabaza, y lo pongo todo crudo al a vez. Pero vamos, para tardar menos. Lo del sofrito me parece muy rico siempre.
ResponderEliminarEstán ricas con mejillones, también.
Lentejas con curry y mejillones.
ResponderEliminarA dónde iremos a parar.
Iremos a parar a los restaurantes de comida chatarra, evidentemente.
ResponderEliminarYo las lentejas, por el momento, sólo las hago en verano en ensalada (otras veces garbanzos, otras judiones -con perdón-) con una vinagreta que me sale muy heterodoxamente rica. La inspiración me la dio Charlie M que es un artista de la leguminosa fría y caliente.
ResponderEliminarTampoco están mal con zampone y un sofrito de tomate, cebolla y apio hecho aparte y añadido al final.
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